En estos días cobraron notoriedad las declaraciones del ex gobernador de Mendoza con relación a la posibilidad que dicha provincia pudiera separarse de la República Argentina declarando su independencia. En ocasión de celebrarse un nuevo aniversario de nuestra Independencia nos parece oportuno enumerar algunas de las circunstancias y dificultades en las cuales se tomó dicha decisión, las opiniones de los representantes cuyanos en dicha determinación y la persistencia de algunos de estos debates hasta nuestros días, sin que necesariamente sean los mismos o que se hayan resuelto a pesar del transcurrir del tiempo.
En la historiografía argentina se suele dar por supuesto que entre 1810 y 1820 existió una nación y un correspondiente estado argentino o rioplatense que justamente se habría derrumbado en 1820 y del cual surgió un proceso de anarquía. Por esto es oportuno resaltar que el Congreso de Tucumán iniciado en 1816, tuvo un complejo desempeño después de esa decisión, durante el cual cambió su lugar de funcionamiento a la ciudad de Buenos Aires y finalizó sus tareas promulgando una Constitución en el año 1819, que es considerada como el origen de todas las desavenencias que se produjeron en el “fatídico” año de 1820 del cual conmemoramos su Bicentenario.
Seguí leyendo el artículo completo en La Capital:
*Departamento de Historia. Centro de Estudios Históricos (CEHis). Instituto de Humanidades y Ciencias Sociales (INHUS). Facultad de Humanidades de la Universidad Nacional de Mar del Plata.